En El Alfalfal, un pequeño poblado del Cajón del Maipo, camino hacia la cordillera de Los Andes, está la escenificación de la polémica social por el proyecto hidroeléctrico Alto Maipo, que tiene un avance del 27% y enfrenta un recurso de protección en la Corte Suprema. Las casas de los habitantes de este lugar quedaron entre una muralla que supuestamente los aisla del ruido y la contaminación, pero los testimonios y las escenas de los pobladores encerrados narran una historia de desesperación y promesas incumplidas.





























